Por: Jacqui González.

Con 95 años de edad, Lorenzo Torres el bolero más longevo de la ciudad de León Guanajuato dedicó con pasión y orgullo el trabajo de lustrados de calzado desde los 8 años. El comenzó en el jardín principal del centro Histórico donde la boleada costaba 20 centavos.

Su interés por el oficio surgió gracias a su padre, quien también era bolero. "Yo era como la sombra de mi padre y de andar tanto tiempo con él le dije que también quería ser bolero" recuerda Lorenzo.

Con el tiempo adquirió habilidad para conocer las marcas de los zapatos gracias a sus clientes y desarrolló su propio estilo para limpiar calzado. Gracias a su experiencia le permitió adueñarse de su propia frase de "permítame limpiarles sus zapatos de tal marca", logrando hacerse de sus propios clientes “recuerdo que en un día llegaba a bolear hasta 60 pares de zapatos” así lo afirmó Lorenzo.

A lo largo de los años, ha tenido la oportunidad de bolear los zapatos de empresarios, curtidores y hasta del presidente Adolfo López Mateos. "Mi mayor experiencia y satisfacción fue ver boleados los zapatos de un presidente".

Sin embargo, la vida de Lorenzo Torres no ha sido fácil. Ha enfrentado desafíos y ha tenido que luchar para mantener su oficio. "La experiencia más desafiante fue cuando nos corrieron de ahí del centro diciendo que los boleros daban un mal aspecto a la ciudad", recuerda, pero gracias a un licenciado en derecho, nos consiguió un amparo para que pudiéramos seguir trabajando ahí".

Además de ser lustrador de zapatos, por un tiempo también se dedicó hace actuario gracias un cliente José Guerrero gracias a él aprendió a escribir en máquina. También llegó a ser prefecto de una escuela de educación física donde recuerda a ver vivido muy buenos momentos con alumnos.

El bolero ha tenido que batallar a lo largo de los años desde estar sentado de 8 a 10 horas sentados en incomodas sillas hasta enfrentarse hoy en día a un oficio que ha ido desapareciendo a causa de que la mayor parte de las personas prefieren usar tenis.

Actualmente Lorenzo, se ha retirado de su oficio que por mucho tiempo lo hizo con cariño y orgullo debido a su estado de salud, pero sigue siendo un hombre con una gran pasión por la vida. Su historia es una inspiración para todos aquellos que buscan hacer de su pasión una carrera.