Siendo un lugar dónde la abundante tierra fértil es la inagotable fuente de los frutos que han alimentado desde los indios chichimecas hasta las actuales generaciones, Aguascalientes convierte sus platillos más representativos en homenajes, tanto para quien los consume, como para quien los elabora. Ahora desde el poblado Real de Asientos, tendremos una pequeña muestra de lo que éste estado puede ofrecernos en cuanto a gastronomía se refiere.

El estado de Jalisco, como todos los demás de la República Mexicana, tiene una gran variedad de delicias gastronómicas por ofrecer; sin embargo, una de las más importantes y representativas es la birria, ya que éste delicioso platillo es orgullosamente originario de ésta zona del país y por lo tanto uno de los lugares donde más se consume y disfruta.

La palabra Tlaxcala proviene del náhuatl tlaxcalli que significa tortilla o pan de maíz, y aunque en la época prehispánica los tlaxcaltecas fueron aislados por su fiereza y tenacidad en la lucha contra los mexicas y por lo tanto carecían de una considerable cantidad de ingredientes que se comercializaban entre las demás ciudades, lograron inventar una grandiosa y por demás exquisita variedad de platillos que aún hoy en día son admirados y saboreados por miles de personas de todo México, un buen ejemplo de ellos es la preparación de los escamoles y los chinicuiles.

Se dice que el estado de Michoacán es una de las regiones de México donde nace el agua, por lo que sus tierras de cultivo son incomparables y el sabor de sus platillos son para quien los prueba, una experiencia sin igual. Daremos un suculento recorrido con ensalada de bosques, bebidas refrescantes de lagos y ríos, guarnición de montañas y selváticos aromas de picantes salsas, así es la cocica michoacana.

Debido a su privilegiada ubicación geográfica, el estado de Puebla ocupa un lugar muy especial en la historia gastronómica popular de nuestro país, ya que es más que evidente el inmenso arte culinario incluido en sus platillos desde la época prehispánica, colonial y actual, comprendiendo entre ellos utensilios de barro y talavera para la elaboración de manjares propios de esta región, como el famoso mole poblano.

El estado de México, dotado de geografías y climas muy diversos ofrece a sus habitantes preparaciones tan variadas como únicas a través de la extensa cantidad y calidad de su producto agrícola más importante: el maíz. Y es que incluso la creación del hombre y la mujer se ve reflejada en la preparación del nixtamal, que es la mezcla base para la preparación de una gran variedad de creaciones culinarias que van desde la tortilla misma, hasta las quesadillas y los tradicionales tlacoyos y tamales.