En la ciudad de Alicante, España; cede de la Volvo Ocean Race desde el año 2009 es en donde los equipos se preparan para la edición número 12.

Todos los equipos que competirán en la Volvo Ocean Race trabajan codo con codo para completar los últimos preparativos y en preparar sus tripulaciones y barcos, bajo la atenta mirada de un público proveniente de todo el planeta que han llegado para ver la salida.

Tras años de planificación, meses de entrenamiento y preparación, los 7 equipos finalmente entran a la línea de salida de la edición número 12 de la Volvo Ocean Race. Comienza la partida.

Tras una semana de navegación, los 7 equipos han dejado el Mediterráneo y bajan por la costa africana impulsados por el viento de tierra. Los giros oceánicos todavía no les ha ayudado a adentrarse en el mar para dar con la mejor ruta y lograr entrar sin cometer errores para liderar la batalla.

Hasta el momento la competencia ha sido muy reñida entre los equipos, luchando codo con codo por el liderato, y el menor error les puede costar muy caro. Tras descender por la Costa africana, la flota finalmente ha puesto rumbo oeste, hacia las Islas de Cabo Verde.

Tras rodear la isla brasileña de Fernando de Noroña, la flota ha navegando agrupadamente pero los lideres se escapan, y toca a los navegantes de cada equipo diseñar la estrategia para impedirlo.

Tras más de 10 mil km. de competencia, pocas millas separan a los barcos que luchan por llegar en primer lugar a la línea de meta. Lo novatos contra los veteranos, y aún todo es posible ya que llegar a Ciudad del Cabo no es tan fácil como pudiera parecer.

La primera etapa ha sido una gran curva de aprendizaje, y los equipos que han tenido un mal resultado hacen cambios drásticos de estrategia y de personal.

Tras dos semanas de escala, en la Ciudad del Cabo, la Volvo Ocean Race vuelve al océano para comenzar la segunda etapa.

En el sur del océano Indico, por razones de seguridad, el control de regata ha decidido establecer una zona de exclusión que mantenga a los equipos alejados de arrecifes de la costa y de la amenaza de los piratas en el cuerno de África.

Hace 3 meses 7 equipos tomaron la salida en el puerto de Alicante, España; ahora uno de ellos está en extremo peligro en el océano Índico. A bordo, el objetivo del equipo es mantenerse a salvo y unidos.

Hace 2 semanas que la segunda etapa dio comienzo en la Ciudad del Cabo. Tras adentrarse en el océano Antártico, cambiar a depresión tropical y perder un barco en un arrecife la flota vuelve a navegar al máximo.

Los 6 equipos que continúan en la regata luchan por subir al podium, y una vez más todo dependerá de la navegación. El Golfo de Omán será clave para llegar en la mejor posición a el Estrecho de Omán.

Durante la mayor parte de la regata la flota lucha contra constantes cambios de viento, lo que hace el viaje hacia Abu Dhaví, su destino, todavía más complicado.

Abu Dhaví es el puerto de escala en el que se celebrará el final de la segunda etapa. Durante las próximas 2 semanas en la ciudad se instalarán albergues para los regatistas y sus familias. Este mismo recinto albergará también el taller de mantenimiento donde se pondrán a punto los barcos para la próxima etapa.

La etapa 3 es muy complicada, sus ruta está llena de obstáculos y los regatistas saben que en esta etapa su capacidad será puesta al límite más que nunca. Desafortunadamente la falta de viento conlleva a una salida sin sprint, pero cada equipo intenta sacarle el máximo partido.

Tras más de una semana en el mar , la flota se mantiene junta, y las tripulaciones cada vez luchan más fuerte por cada milla que pueden ganar al adversario. Conforme los equipos llegan a Sri Lanka el viento es cada vez más fuerte y los barcos navegan más rápido a sus destino.

La etapa 3 es la más dura, y preocupa a los equipos no sólo por su duración, también les preocupa por los numerosos obstáculos de sus ruta. El mayor obstáculo entre los equipos y sus destino final es el estrecho de Malacca

Tras 25 días en el mar la etapa 3 está por llegar a su fin. Ha sido una etapa muy dura y la falta de viento junto a la navegación costera, mantienen a los equipos en constante alerta por los peligrosos riesgos que tienen que enfrentar.

La provincia China de Sanya es la cuarta escala de la Volvo Ocean Race. Tras casi 4 semanas en el mar todos los barcos necesitan de un mantenimiento, y en el astillero los han dejado listos para navegar de nuevo.

La flota se encuentra inmersa en la etapa 4 que los lleva desde la provincia China de Sanya hasta Auckland, Nueva Zelanda.Los primeros días de la etapa han sido los más duros de la competencia, por lo que, las tripulaciones están sufriendo los efectos físicos y mentales de las duras condiciones

Se disputa la cuarta etapa de la Volvo Ocean Race. Desde que dejara el puerto de Sanya, la flota ha estado luchando para avanzar hacia el océano Pacífico y dirigirse con rumbo hacia el norte de Filipinas.

La cuarta etapa ha sido muy variada. Tras el mal tiempo que encontraron en el mar del sur de China, los equipos navegan a través del océano Pacífico, cruzando el ecuador y adentrándose a la zona de convergencia, entre el tropical. El lugar se caracteriza por la falta de viento, que hace que todo pueda pasar.

Tras una apretada llegada a Auckland, los equipos se toman un merecido descanso antes de la legendaria etapa 5. Los barcos tienen que estar en perfectas condiciones para adentrarse a océano Antártico.

Después de un merecido descanso los equipos vuelven a el agua para la quinta etapa. El resultado no puntúa la clasificación general, pero sí podría dividir un potencial empate cuando la flota cruce la línea de meta en Gotemburgo.

La etapa 5 lleva a los barcos desde Auckland en Nueva Zelanda, a Atajai, Brasil, con más de 12, 500 km. Es la etapa más larga y también de las más complicadas.

La etapa 5 de la Volvo Ocean Race es la más dura de todas, ya que lleva a la flota a través del durísimo océano Antártico, desde Auckland, Nueva Zelanda, a Atajai, Brasil. Temperaturas heladas y vientos implacables han puesto a la tripulación y barcos camino a Cabo de Hornos.

Han pasado dos semanas del comienzo de la durísima etapa 5 y la flota navega con viento fuerte y temperaturas muy heladas a través del océano antártico. La competencia ha estado muy apretada, lo que lleva a los competidores al límite y esto puede costar muy caro a los equipos.

La Volvo Ocean Race se encuentra en su quinta etapa de Auckland, Nueva Zelanda, a Atajai, Brasil, atravesando el temido océano Antártico. Desafortunadamente uno de los equipos ha perdido terreno tras dañar su vela y no ha podido aprovechar un fuerte viento que ha impulsado al resto de la flota con rumbo al norte.

Después de cubrir la más dura de las etapas que atraviesa el océano Antártico, la flota se toma un merecido descanso en la bonita ciudad de Atajaí, Brasil, mientras en los astilleros los equipos de tierra trabajan día y noche.

Por ser la competencia oceánica más extrema del planeta la Volvo Ocean Race ha desarrollado una forma muy especial para estar en contacto con sus fans. Las cámaras a bordo permiten tener una increíble perspectiva de la vida de los tripulantes a bordo del barco.

La flota se disputa la sexta etapa de la regata, y peleando codo con codo, los barcos, se dirigen al norte por el Atlántico en dirección a Newport, Rhode Island, en la costa este de los Estados Unidos

Tras estar tres semanas en altamar, la flota llega a Newport, Estados Unidos. Ha sido una etapa muy dura, 6 mil millas de etapa. El barco franco-chino logra vencer a su rival más próximo, Abu Dhabi, por sólo 3 minutos y 25 segundos.

La flota está en Newport, Estados Unidos, preparándose para etapa 7, que atraviesa el Atlántico hasta Portugal. Regatistas y equipos de tierra están ocupados preparando los barcos. La escala se ha convertido en un festival para los aficionados.

La etapa 7 es el último tramo oceánico, 3 mil millas a través del océano Atlántico, desde Newport hasta Lisboa en Portugal. Tras salir de Newport el liderato cambia constantemente entre los 6 barcos de la flota durante los tres primeros días.

La etapa 7, de las 9 que comprende la Volvo Ocean Race, es la última oceánica, desde Newport a Lisboa. Tres equipos han sido los mejores en rodear y salir de una enorme zona sin viento.

La Volvo Ocean Race se encuentra en Lisboa, en donde comenzará la etapa 8 con meta en Lorient, Francia. Sólo quedan dos etapas para el gran final en Suecia, y es un recorrido de 647 millas a través del complicado Golfo de Vizcaya.

Las duras condiciones en el Golfo de Vizcaya hicieron de la etapa 8 una de las más duras de ésta maratón de 9 meses, pero también la mejor para el equipo femenino que ganó su primer etapa de la regata.

La flota se encuentra en la Haya para una corta escala técnica en la etapa 9. Los aficionados se han volcado para apoyar a las 7 tripulaciones. Sólo quedan 480 millas hasta la llegada en Suecia, y es la hora de la verdad para los líderes de equipo. ¿Cuál equipo será el ganador absoluto de la doceava edicion de la Volvo Ocean Race?.

TV4 te lleva a vivir el evento deportivo profesional más largo y difícil del mundo, Volvo Ocean Race. Éste es el desafío más agotador del equipo de vela, la regata que cruza cuatro océanos y recorre 45 mil millas náuticas, ahí, navegando a bordo de los monotipos Volvo Ocean 65, los mejores navegantes sacarán lo mejor de sí mismos en las condiciones más extremas del planeta.