El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió a Luis Donaldo Colosio Riojas, en el sentido de que no puede indultar a Mario Aburto Martínez, quien hasta el día de hoy es el asesino confeso de su padre, Luis Donaldo Colosio Murrieta.

Ante el anuncio de la Fiscalía General de la República (FGR) de reabrir el caso y señalar que existe un segundo tirador; Colosio Riojas pidió indultar a Aburto Martínez para que México esté en paz.

“No puedo hacerlo, sé que ya no quiere ni sus familiares saber nada de esto que fue horrible, pero se trata de un asunto de Estado y que yo quiero, que a lo que a mí corresponde, que no se deje de investigar, pero yo no voy a dar carpetazo a un asunto así", explicó López Obrador.

El Jefe del Ejecutivo dejó claro que el magnicidio es un asunto de Estado y no debe quedar impune, por lo que insistió en que no tiene ninguna intención de utilizar el caso Colosio con propósitos políticos, pero lo que acotó que “es importante de que no haya impunidad”.

En el Palacio Nacional, López Obrador aseguró que el caso Colosio no puede pasar desapercibido, debido a que no se puede tolerar el magnicidio, pero sobre todo debe garantizarse que no se repita un acto como esté.

En su intervención, Andrés Manuel López Obrador hizo mención a un comunicado emitido por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) donde señala Jorge Alberto Sánchez, ex colaborador del Cisen y a quien se señala como el segundo tirador, además de que se le relaciona con el ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, que en aquel momento era funcionario del centro de seguridad.

“A este personaje, según la investigación de la Fiscalía, quien va a rescatarla es nada más y nada menos que García Luna, que trabajaba en el Cisen... no es cualquiera cosa. Como se trata de un crimen que dañó mucho al país y que no se debe tolerar ningún crimen de esta naturaleza, no hay que dejarlo pasar. Es un crimen de Estado”, aseveró López Obrador.